Dona’m Cine incentiva producciones audiovisuales feministas de bajo presupuesto y carácter social
07/03/2017 – Ares Biescas Rue (@aresBiescas)
19:00 horas, viernes 3 de marzo. Zumzeig Cine se convierte en refugio de la lluvia que azota Barcelona esa tarde. Una pequeña cola de gente que se ha quedado sin entrada espera con anhelo que alguien no aparezca para poder entrar en la tercera edición de la entrega de premios Dona’m Cine, impulsada por la asociación de cooperación Entrepueblos y la productora Producciones Doble Banda.
Las afortunadas pasamos a la sala principal, un almacén reconvertido en una íntima sala de barrio donde sus paredes acogen las voces pausadas de las presentadoras: “estamos aquí para celebrar que hemos cumplido nuestros objetivos: dinamizar documentales y audiovisuales con perspectiva feminista que no tienen cabida en los medios de comunicación”. Antes de empezar la proyección del palmarés seleccionado, se hace especial mención a Berta Cáceres, afín a personas involucradas a Zumzeig Cine. En el día de la celebración de los premios, se recuerda su asesinato un año antes por los poderes económicos contra los que estaba luchando en Honduras.
Se cierran las luces. Entre la cadencia de imágenes que se proyectan hay ideas que relucen con fuerza: la elección del orgasmo y el placer antes que la muerte en “La decisión” de Erabakia, la rebelión contra la Iglesia a través de la sexualidad en “Rebelión” de María Galindo o la perspectiva no etnocéntrica feminista: “no te encargues de liberarme, lo sé hacer yo sola” expresa la protagonista marroquí del corto «Sofía» de Alba Pascual Benlloch.
Después de los aplausos se inicia una mesa redonda en la que Lucía Egaña, transfeminista chilena y activista postporno, y Yolanda Olmos, productora audiovisual feminista, hablan sobre “la importancia de producir audiovisuales al margen de la norma” y sobre la utilización de estos como arma política. El debate cuenta con la intervención especial de Nelly Wampash Tsakimp, lideresa del pueblo shuar, que habla sobre su lucha contra las minerías y el papel del activismo feminista en esta. Su experiencia de resistencia enlaza con el posterior homenaje a Berta Cáceres, un referente en la lucha contra los poderes económicos y políticos en América Latina.
Las palabras cesan. La voz de Mireia Vives acompañada por la guitarra de Borja Penalba da vida a los versos de Maria Mercè Marçal: “Bruixes d’ahir, bruixes del dia, ens trobarem a plena mar…”. Mientras la música suena tenemos tiempo para reflexionar sobre el “zumzeig”; en catalán, una vibración continuada y apenas inaudible, que las reflexiones han dejado en nuestra mente. El cine ha reivindicado su función, la de un espacio escondido y refugiado de una ciudad que parece encontrar «a duras penas su inocencia».